Ahora os voy a mostrar lo sencillo que es decorar una mesa para un desayuno
romántico solo con las cosas que tienes en casa.
1. Como primera opción elegí lo más típico para San Valentín, una mesa muy
romántica en tonos rojos y blancos.
2. Para la siguiente decoración elegí utilizar el blanco, símbolo de pureza
y elegancia.
3. Un estilo rústico también puede proporcionar elegancia, con esta
fotografía os demuestro que una cosa no está reñida con la otra.
4. Marrón y blanco, otra bonita elección.
5. Una decoración más sencilla, moderna y con un toque especial.
6. ¿Amarillo? . . . ¿por qué no?
Las claves de cada decoración:
1. Solo cambiando las flores y el corazón por una vela y unos dulces, la
mesa puede parecer diferente, prueba a cambiar la decoración de la mesa hasta
encontrar la que mejor muestre tu personalidad.
2. La elección de la mantelería es muy importante, elige la que más
romanticismo pueda aportar a la velada, pero ten cuidado con los manteles con
encajes, siempre que te decidas por uno de ellos, procura que lo demás sea
sencillo, no caigas en el exceso.
3. El mimbre le da un toque rústico pero elegante, prueba a mezclarlo en tu
mesa y encontrarás la decoración perfecta.
4. Si no dispones de nada que encaje con la decoración para colocar pasteles
o frutas, prueba con utilizar una bandeja con una servilleta a juego con la
mantelería.
5. Pon alguna nota romántica en la mesa, no es necesario ser un artista para
ello, con una simple nota servirá.
6. Atrévete con otros colores para tu mesa, el romanticismo es lo que cada
pareja quiera, por lo que cualquier color es bueno siempre que se combine
bien.
Ya tenéis unas cuantas ideas, ahora solo tienes que mirar lo que tienes en
casa y preparar lo que más te guste!!!
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